Dicen que no se puede ser un buen educador si uno no se esfuerza por educarse a sí mismo.
Si ello es cierto, y yo lo creo, tal vez sería bueno recordar que nuestros niños no harán en la vida lo que les digamos que hagan sino lo que vean que nosotros hacemos.
La siguiente guía de salud emocional encierra una sabiduría milenaria, pues muchos de sus consejos tienen más de 2.5oo años de antigüedad.
Y eso contando sólo desde que fueron recogidos por escrito.
Algunos pueden llegar a los 8.000 años. El poso de experiencia de la vida que contienen es ciertamente profundo.
Si ello es cierto, y yo lo creo, tal vez sería bueno recordar que nuestros niños no harán en la vida lo que les digamos que hagan sino lo que vean que nosotros hacemos.
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Y eso contando sólo desde que fueron recogidos por escrito.
Algunos pueden llegar a los 8.000 años. El poso de experiencia de la vida que contienen es ciertamente profundo.
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